La histórica campaña de voluntariado ambiental de la Fundación Limne llega a su duodécima edición y, siguiendo el espíritu de años anteriores, “Mans al Riu” pretende seguir fomentando la participación ciudadana en la conservación y mejora de los ríos.
La acción, que se llevará a cabo este fin de semana, consiste en una limpieza de ríos organizada conjuntamente en diversos municipios con ánimo de visibilizar el estado de nuestros ecosistemas acuáticos, incitando a una gestión responsable de nuestros residuos. Durante la última edición de la jornada se retiraron más de 6 toneladas de residuos de los tramos de ríos y barrancos en los que se actuó. Desde Limne recalcamos que la campaña Mans al Riu quiere señalar que muchos tramos de río se usan, incomprensiblemente, como vertedero ilegal. Tanto es así que en cada edición retiran multitud de residuos inverosímiles, como colchones, neveras, televisores, sofás, tumbonas, bombonas de butano o neumáticos, entre muchos otros.
La campaña “Mans al Riu” no se creó para solucionar el problema actuando con voluntarios, sino para que los asistentes a la jornada conozcan de primera mano la problemática y transmitan el mensaje a sus familiares y convecinos. Es necesario informar a los ciudadanos de cuán pernicioso es el abandono de enseres en el río, dando a conocer las alternativas que ofrece cada municipio para la gestión de esos residuos voluminosos.
“Mans al Riu” llegará este año a los municipios de Alborache, Alfarb, Algemesí, Almassora, Alzira, Bétera, Borriana, Canals, Carcaixent, Carlet, Castelló de la plana, Castelló, Catadau, Catarroja, El Saler, El Verger, Elx, Gavarda, Gandia, L’Alcora, La Pobla Llarga, Llombai, Manises, Manuel, Montaverner, Montroi, Ondara, Polinyà, Quart de Poblet, Real, Sellent, Senyera, Sueca, Tavernes de la Valldigna, Torrent y Vinalesa, gracias al patrocinio de Global Omnium y del Consorci de La Ribera.
En esta ocasión, el reto que se plantea en una situación de COVID-19 es formar grupos reducidos, que permitan continuar visibilizando el mal uso que en ocasiones se hace de nuestros espacios naturales. Además, en la mitad de los municipios citados, la actividad se plantea como una campaña de ámbito escolar. Para el resto se trata de una actividad abierta a la participación de toda la ciudadanía, si bien se requiere inscripción previa, y tiene un marcado carácter lúdico y didáctico, ya que, además de mejorar los espacios fluviales en los que se actúe, se hará hincapié en los medios que existen para gestionar los residuos, fomentando, por tanto, un destino más adecuado.